Nachmorg

Donnerstag, September 29, 2005

Sommerreflexionen & Nachtgeschöpfe

A veces ocurre que a una se le ponen los pies bailarines y siente una necesidad irresistible de saltar de antena en antena por los tejados que aparecen a su paso; y a veces, las menos, una está tan encantada de llenar el azul de música que no ve que un gorrión jurado le echa el alto por escándalo público y se convierte en fugitiva sin saberlo, dejando tras de sí el ruido metálico de las antenas precipitándose en el vacío, abocadas al estrépito y al desorden.

Otras veces, una se convierte en brisa cálida, dejándose mecer por las hojas de los olivos en las noches de verano propicias para incursiones a la luz de la luna. Tan sólo es necesario abrir la ventana, protegerse convenientemente de los ataques de las corrientes traicioneras y permitirse levitar sin preocuparse por lo que opinen los vecinos curiosos del edificio de enfrente.

Hay ocasiones especiales en que nada más dejar reposar las manos sobre el teclado, está claro que esta vez serán ellas quienes escribirán, con o sin permiso, y tus ojos se maravillan de lo que leen y ven crecer flores en las puntas de tus dedos, y una se queda encogida en la silla, hecha un ovillo, creyendo que todo es una alucinación provocada por las horas intempestivas.

En esos momentos mágicos, cuando el tiempo se detiene y es posible ver a los hombres grises consumirse entre muecas de horror, cuando las flores horarias te conceden un minuto de su esplendor vibrando en tu mano, es cuando hay que ponerse los zapatos verdes y echar a correr al bosque encantado, desplegar las alas y sortear a los vampiros, sostener la mirada a los lobos sedientos de sangre que se acercan con fauces abiertas y ahuyentarlos de tu refugio.

Nada temen más las criaturas de la noche que dos ojos francos y un alma transparente; nada infunde más miedo que ver la propia miseria.



En esos momentos mágicos (...) es cuando hay que ponerse los zapatos verdes y echar a correr al bosque encantado

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Dienstag, September 06, 2005

Lieben Dank

Sommerschluss und der Himmel über Asturien weint. Einunzwanzig Uhr und Einbruch der Dunkelheit draußen. Den Ausblick aus meinem Fenster habe ich im Kopf, schwarz-weiß, in Aufnahmen in Serien.

Willkommensumarmung, Brezelnidee und –lieferung für Irene, chapuzón im Meer, Lachen, Juro-Fotos, auf dem Markt bummeln, no me entiende, no me entiende, Zehringe für lächelnde Füsse, Tanzen, Teelichter beim Abendessen, Lachen, Spazierengänge an der Meerespromenade, voller Geduldssack, Fahren, Kaffeepäuschen, Tiefgespräche, Jagdt nach Cutre-bars, Betreten von bedrohlich aussehenden Gassen, Lachen, Kirchenturmaufstieg, sämtliche Bäder in sämtlichen Flüssen, Badezimmerüberschwemmungen, SuperBock-Bestellungen, Lachen, Einparken, (Miss)Verständnisse, wir sind verloren!!!, minifalda azul, não, Rießen-Tostas ohne Marmelade –sie können´s nicht, echt-, Taubenangst, Lachen, Piki-extra-care, Suche nach dem Unbewusstsein, Ciudad Rodrigo, Salbe gegen Stiche der gefährlichen Bichos, Aufbewahren und Mitschleppen der Porto-Brezeln trotz Misserfolgs, sim, Jorge Luis Borges, Lachen, self-fulfilling prophecies, Fussballspielen, muy ágil, die Niederländer und die Welt, azeitonas-Schälchen-Verhandlung, las tierras, las tierras, las tierras de España, Xxxflecke :-)), cubiletes, Pflanze , Anruf in Abwesenheit.


In der nächsten Zukunft folgt aktualisiertes Foto

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